Cuando se tiene algún tipo de problema bucal, la historia que sigue, con independencia de quién sufra ese tipo de problemas, tiene mucho que ver con incontables incomodidades y dolores. Es algo que ya hemos comprobado muchas personas, y más todavía en un país como en el que nos encontramos, en el que el cuidado de nuestra salud dental ha sido olvidado durante muchos años en líneas generales. La verdad es que este es un problema bastante repetido en España y hay mucho camino por delante para resolverlo.
No hay duda de que el dolor que supone tener afectado un diente o una muela hace que nos sintamos realmente mal. Pero lo peor no es eso, sino que esa dolencia también se pueda extender al resto de nuestro cuerpo. Es ahí donde vienen los problemas más grandes, que son los que están relacionados con una extensión de esos dolores a lugares como la cabeza o los oídos. Estas situaciones son bastante más comunes de lo que podamos llegar a pensar y es evidente que ponerles remedio es el siguiente capítulo en la vida de una persona.
Existe una noticia del portal web El Dentista Moderno que afirma que el 43% de los españoles sufren problemas de sensibilidad dental y de encías, algo que deja claro que en nuestro país es bastante habitual descuidar la salud dental y que, en efecto, es necesaria una mejora en este sentido. Desde luego, es evidente que esto ocasiona múltiples problemas para nuestro bienestar y que esta puede ser una de las razones de nuestra infelicidad o de nuestro agobio en determinados momentos del día. Esta es una situación que se repite en múltiples casos en todo nuestro territorio pero que tiene solución: confiar en un dentista y adquirir hábitos de cuidado dental.
No obstante, hay que tener en cuenta que una mala salud dental puede ocasionar problemas mucho más graves de los que nos podamos imaginar. Según un artículo publicado en La Razón, una mala salud e higiene dental puede ocasionar que la salud de nuestro organismo se altere y que eso termine derivando en un empeoramiento del rendimiento deportivo. Son muchos los profesionales de élite que, a causa de este asunto, han visto reducidos sus éxitos deportivos. Y es una verdadera lástima que, después de todo lo que cuesta triunfar en el deporte profesional, no lo consigamos por no lavar nuestros dientes.
Existen múltiples historias de deportistas que, siendo de élite o no, no han progresado en el ejercicio de su actividad como consecuencia de no haber cuidado de sus dientes como deberían. Los expertos de la Clínica Dental Carrilet 100 nos han confirmado lo que llevábamos tiempo sospechando: que una mala higiene bucal afecta a nuestro rendimiento físico y que esa es una de las causas por las cuales hay muchos profesionales del deporte que, a pesar de haber triunfado cuando eran jóvenes, han terminado estrellándose.
Durante muchos años, la ciencia ha desconocido la relación existente entre la salud de los dientes y el rendimiento físico de las personas. Ahora que ya sabemos una consecuencia más del mal estado de nuestra boca, tenemos que poner todo nuestro foco e interés en resolver todas y cada una de las cuestiones que puedan implicar una amenaza para nuestra boca y las diferentes piezas que la componen. A grandes rasgos, es ahora posible que afrontemos el día a día con mucha más energía y que, a fin de cuentas, aprovechemos las horas mejor que ahora.
Una cuestión que no solo es válida para los deportistas
Es cierto que la vida de un deportista no tiene nada que ver con la de una persona que no lo es. Sus historias son completamente diferentes, pero las consecuencias físicas que entraña el no cuidar de nuestros dientes es algo que afecta a unos y a otros. Y es que alguien que no cuide su boca y que no sea deportista tampoco encontrará la fuerza física suficiente, en su caso, para hacer frente al conjunto de tareas que tienen que resolver a lo largo de un día, ya sean referidas a su trabajo o a su vida privada.
Estamos plenamente convencidos de que, si la sociedad española termina siendo consciente de las cosas que hemos ido comentando a lo largo de todo este artículo, encontrará las razones suficientes como para empezar a cuidar de una manera un poco más incisiva su boca y sus dientes. Hay pocas sensaciones que sean peores que sentirse agotado físicamente y abatido, así que serán miles los hombres y mujeres que empiecen a tomarse realmente en serio su salud bucodental. Es algo que, al menos, merece la pena valorar.
