Comienza el año y aún resuena en nuestra cabeza el soniquete de los niños de San Ildefonso cantando los premios del gordo de Navidad. Hay quien dice que el sorteo del Niño, que se celebra el día de reyes, tiene más probabilidades de premio. ¿Qué sorteos y apuestas del Estado son las que más tocan? Lo analizaremos estudiando las estadísticas.
Los juegos públicos de azar son una tradición arraigada en nuestro país. Millones de personas juegan cada semana a la lotería, a la primitiva, a la bonoloto o a las quinielas. En la mayoría de los casos es un juego responsable, comedido. Nadie deposita su destino en manos del azar. Nadie piensa que se va a hacer rico jugando todas las semanas a la lotería. Pero… ¿Y si toca?
Los sorteos y apuestas del Estado son también un medio de interacción social. No son pocos los grupos de amigos o de compañeros de trabajo que tramitan cada semana un boleto de manera colectiva. Forman peñas. El día en que revisan los resultados es una excusa para reunirse entre ellos.
Muchas de estas peñas han recibido alguna vez algún premio menor. La cobranza del premio ha servido para financiar una cena o una fiesta para el grupo.
Los administradores de Lotería María Victoria, una administración de lotería de Huercal – Overa (Almería), con más de 40 años de experiencia, que en los últimos años han dado el salto a internet gestionado apuestas desde su página web, nos dicen que el número de peñas que compran lotería o juegan a la bonoloto por internet ha crecido considerablemente.
Es más rápido y efectivo que tener que desplazarse a la administración física. Además, como ellos dicen, se puede tramitar en cualquier momento. Internet nunca cierra.
Cuando se hace el último clic en la página web, la suerte ya está echada. Pero antes de hacerlo te conviene saber donde tienes más posibilidades de premio. Estas son las loterías que más tocan.
Sorteos ordinarios de lotería.
En realidad, todos los sorteos de la lotería nacional tienen un funcionamiento parecido. Tienes una probabilidad de que te toque el primer premio de 1 entre 100.000. La más alta de todas las apuestas públicas. Esta es común para los sorteos ordinarios y para los especiales, como El Gordo de Navidad, el Sorteo del Niño o el Sorteo del Oro de la Cruz Roja. Sin embargo, los sorteos ordinarios tienen un par de peculiaridades que las hacen especialmente interesantes.
La primera de ellas es que se celebra dos veces por semana. Tienes un sorteo todos los jueves y otro todos los sábados.
La segunda característica es el precio reducido del décimo. Solo 3 €, frente a los 20 € que cuesta un décimo del Sorteo de Navidad. Por 6 €, puedes jugar con el mismo número el jueves y el sábado, aumentando la probabilidad de que te toque premio.
Loterías y apuestas del Estado destina el 70% de lo recaudado en los sorteos ordinarios de lotería a premios. Por lo que la posibilidad de que te toque un premio de cualquier cuantía es de 1 entre 7.
Aquí los premios son menores, te puede tocar desde un reintegro hasta unos cuantos euros, pero esto anima a los apostantes para continuar jugando.
El Sorteo del Niño.
El periódico El Español compara en un artículo el sorteo extraordinario del Gordo de Navidad y la Lotería del Niño, y afirma que en El Niño tienes algunas posibilidades más de que te toque.
Para obtener el primer premio, la probabilidad es la misma en todos los sorteos de lotería, 1 entre 100.000, pero el Niño, a diferencia de El Gordo, ofrece una mayor cantidad de premios.
En la lotería de Navidad se reparten 15.304 premios de diferentes cuantías. Esto significa que tienes un 15,304% de obtener un premio. En la lotería del Niño el número de premios es de 37.920. La probabilidad de obtener un premio es del 37,92%. Más del doble.
Aquí debemos tener en cuenta que los premios son de menor cuantía que en la Lotería de Navidad. En el Niño solo se da un primer, un segundo y un tercer premio. El resto son premios menores.
El gordo de Navidad.
Es el sorteo estrella de las loterías y apuestas del Estado. El que más interés suscita y en el que los españoles nos gastamos más dinero.
En una entrevista realizada por el periódico As al economista Ángel Muñiz, profesor de economía de la Universidad Europea de Madrid, afirma que el porcentaje de premios que ofrece la Lotería de Navidad en España es uno de los más altos del mundo en comparación con sorteos análogos que se celebran en el resto del mundo. Sin embargo, no olvidemos que la probabilidad es de un 0,001%. Es decir, hay más probabilidad de que le caiga a alguien un meteorito encima a lo largo del año que ganar el premio gordo de la lotería.
Respecto a algunas preguntas que hacen referencia a ciertos hábitos de juegos de los españoles, como jugar siempre al mismo número o comprar los números que han sido premiados recientemente, el profesor aclara que según la ley de la probabilidad, los números no premiados son más susceptibles de recibir premio.
Si la lotería se celebrara durante millones de años, todos los números tenderían a ser premiados el mismo número de veces. Es decir, todos los números que se juegan tienen la misma probabilidad de premio. No existen terminaciones que sean más proclives a ser premiadas.
La búsqueda del número de la suerte o el hecho de abonarse a un número talismán son supersticiones que utilizan algunos jugadores para diseñar su estrategia de juego.
Lototurf.
Basándose en las estadísticas, esta curiosa apuesta ofrece una probabilidad de 1 entre 8 millones de obtener el primer premio.
Es un juego que combina la dinámica de la lotería primitiva con las apuestas hípicas. El jugador elige 6 números del 1 al 31 más un número de un caballo del 1 al 12 que hace referencia a alguna de las carreras que se celebrarán esa semana en uno de los hipódromos del país.
El domingo se extraen 6 bolas de un bombo, que determina la combinación ganadora, más otra bola de un bombo aparte que representa el reintegro. Al mismo tiempo, Loterías y Apuestas del Estado hará público el resultado de la apuesta hípica correspondiente.
De todo el dinero recaudado en este juego se destina un 55% a premios de diferentes categorías.
El problema es que debido a lo poco popular que es este juego, la cuantía de los premios es considerablemente inferior al de otras apuestas más populares como la Primitiva, las quinielas o la Bonoloto.
La Primitiva.
Acertar los 6 números de la primitiva tiene una probabilidad de 1 entre 13.983.816. Conseguir el premio máximo, que son los 6 números de la combinación ganadora, más el reintegro es de 139,8 millones.
La primitiva ofrece otros premios inferiores fáciles de conseguir. Por ejemplo, acertar 3 números en este juego tiene una probabilidad de 1 entre 57.
Es, precisamente, esta facilidad de obtener premio lo que anima a muchos jugadores a cursar su boleto de apuesta cada semana.
La lotería Primitiva es el primer formato de lotería que se puso en marcha en nuestro país. Fue un invento del Marqués de Esquilache, ministro de Hacienda de Carlos III, para tener una fuente extra de ingresos para las arcas públicas.
Esta lotería estuvo en vigor desde 1763 hasta 1862. Coincidiendo con la lotería nacional desde la guerra de la Independencia. Lotería, esta última, que recibía el nombre de “lotería por números.”
En 1985, Loterías y Apuestas del Estado recuperó el formato de la Lotería Primitiva, suscitando una gran aceptación entre la población. En un primer momento, el sorteo se celebraba solo los jueves, aumentando el número de sorteos semanales progresivamente hasta la actualidad. En que se celebra los lunes, los jueves y los sábados.
La quiniela.
Conseguir los 14 resultados de la quiniela más el pleno al 15 tiene una probabilidad de 1 entre 14.348.907. Basándonos en estadísticas acumuladas.
Uno de los atractivos que tiene la quiniela futbolística para muchos jugadores es que el acierto no se basa únicamente en la suerte. Tener conocimientos futbolísticos y seguir las grandes competiciones ayuda bastante a obtener premio. O al menos, eso piensan algunos.
No es un sorteo aleatorio, como puede ser la lotería, donde se extraen números al azar de un bombo.
Sin embargo, como opinan otros jugadores, cuanto menos te dejes llevar por tus corazonadas y deseos, mejor para obtener premio. Algunos jugadores han ganado a las quinielas sin ser futboleros.
La gran afición al futbol que existe en nuestro país ha hecho que las quinielas conserven un buen tirón de popularidad a pesar de la irrupción de otros juegos de azar como la Bonoloto, el Joker o los Euromillones.
En el fondo, todas estas apuestas son juegos de azar. Las probabilidades de que te toquen son bastante bajas, pero si no juegas, la probabilidad es nula.