Hasta hace unos pocos años ser celíaco era bastante complicado. Porque el proceso de detección de la enfermedad era mucho más lento que ahora, así como era bastante complicado dar con establecimientos sin gluten y la sociedad tenía poco conocimiento sobre la enfermedad. Sin embargo, estas cuestiones han mejorado en los últimos años. Pero esto tampoco significa que sea fácil ser celíaco. Por eso, en este artículo quiero comentar mi experiencia siendo celíaca, os contaré cómo me enteré y os daré algunos consejos efectivos que pueden ayudar a vuestra salud.
Cómo fue la detección de la enfermedad
El proceso de detección de la enfermedad en mi caso fue bastante lento, ya que desde que empecé a tener síntomas hasta que el médico me confirmó que era celíaca pasó más de un año y medio.
Primero comenzaron los síntomas. En mi caso, sobre todo tenía una fuerte sensación de cansancio, dolor de cabeza y por supuesto, algunos alimentos me sentaban muy mal y sufría fuertes diarreas. Pero estos son los síntomas que yo sufrí, algunas personas celíacas padecen otros diferentes. Si quieres conocer los principales síntomas de la enfermedad tienes que leer este artículo.
Pues bien, tras un tiempo con estos síntomas acudí al médico. El primer paso fue una analítica, pero los valores salieron negativos. Aunque el médico por sospechas me recomendó realizar una gastroscopia. Tras esta prueba se confirmó realmente la enfermedad. Una enfermedad que cambió por completo mi dieta y mi día a día.
Consejos para celíacos
Ser celíaco en algunas ocasiones en complicado, porque hay que tener mucho cuidado con la dieta y tu condición puede afectar también a otras personas. Por eso, creo conveniente indicar unos cuantos consejos que me han ayudado en mi día a día.
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Lee bien todas las etiquetas
Es fundamental que cuando vayas a hacer la compra te asegures de leer siempre las etiquetas de los alimentos para detectar posibles fuentes de gluten. Porque puede que pienses que un alimento no tiene gluten.
Sin embargo, si no tiene el sello no te fíes. Porque los fabricantes de alimentos están obligados por ley a etiquetar los ingredientes que contienen gluten. Y en algunas ocasiones por contaminación cruzada no etiquetan los alimentos como sin gluten.
“Nosotros fabricamos harinas sin gluten y para ofrecer total seguridad contamos con un molino en el que únicamente se muelen cereales sin gluten. Así elaboramos harina integral de garbanzos, harina integral de avena, mezcla suave e intensa de harinas sin gluten”, explican desde Rincón del Segura, panadería artesanal ecológica que elabora harinas sin gluten.
Por eso lee siempre las etiquetas de los productos y comprueba que no tienen gluten y no hay riesgo de contaminación.
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Habla con tus familiares y amigos
Es importante que tus familiares y amigos sepan que padeces esa enfermedad. Pero no sólo eso, les debes explicar consideraciones básicas para cuando vayas a comer con ellos. Para que así puedan tener cuidado.
Por ejemplo, es importante que les expliques el riesgo de la contaminación cruzada. Y que si se cocina algo con gluten y luego se utilizan los mismos utensilios para preparar algo para un celiaco la contaminación cruzada puede afectar.
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Ten cuidado con la contaminación cruzada
En el punto anterior decíamos que era importante explicar la contaminación cruzada a familiares y amigos. Pero todavía más fundamental es que tú como celíaco tengas cuidado con ello.
Un truco para evitar la contaminación cruzada si vives en un piso compartido es utilizar bolsas para el microondas y el horno. Porque estas bolsas son una alternativa segura para cocinar alimentos, ya que ayudan a prevenir la contaminación cruzada de gluten durante la cocción. Porque las bolsas para horno y microondas están hechas de materiales seguros y son fáciles de usar, simplemente se coloca el alimento dentro de la bolsa y se sella. La bolsa evita que los alimentos entren en contacto con la superficie del horno o del microondas.
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Busca siempre restaurantes sin gluten
En muchos restaurantes podrás disfrutar de algunos platos sin gluten. Sin embargo, mi recomendación es que busques establecimientos 100% sin gluten, que cuenten con algún tipo de insignia o te los hayan recomendado.
Porque en algunos establecimientos los camareros y la cocina no cuentan con formación ni conocimientos sobre la enfermedad. Por lo que en algunas ocasiones no se tiene en cuenta la contaminación cruzada. Y si acudes a un restaurante que no esté especializado puedes tener una mala experiencia. Incluso a mi me ha pasado en algún que otro restaurante que contaba con un certificado de una organización de celíacos.
Por eso no te la juegues. Porque puedes tener una mala experiencia que afecte a tu salud.
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Busca apoyo
Es fundamental que busques apoyo. Puedes hablar con un médico especializado o un nutricionista.
En mi caso acudí a la federación de celíacos de mi Comunidad Autónoma y fue todo un acierto. Organizaron una charla con un médico especializado a la que me invitaron junto a otras personas que habían sido recientemente diagnosticadas. Esta charla me fue de gran ayuda, ya que el especialista nos explicó cuestiones importantes sobre la enfermedad, solventó algunas dudas y nos dio consejos interesantes.
Pero las federaciones no sólo hacen esta labor. Hay que pagar una cuota anual, pero merece la pena. La asociación a la que pertenezco envía trimestralmente una revista con noticias interesantes, recetas o algunos productos que han salido al mercado. Pero también organiza actividades como degustaciones de comida sin gluten, viajes o quedadas.
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Ten cuidado con las lentejas
Aunque las lentejas son naturalmente un alimento sin gluten, debes tener cuidado con ellas. Porque hay una alta posibilidad de contaminación cruzada. Y es que en muchos envases de lentejas se pueden encontrar restos de cereales. Esto se debe principalmente a que las lentejas se suelen rotar con cultivos como el trigo, así como se suelen compartir almacenes o utilizar la misma maquinaria. Por lo que compra siempre lentejas que tengan el sello de sin gluten si no quieres llevarte ningún susto.
Espero que este artículo te ayude si te han detectado recientemente la enfermedad o por si tienes algún familiar o amigo que es celíaco y quieres conocer mejor su afección.
