Cuanto más pelo, más hermoso. Ahora más que nunca, vuelve a estar in, este dicho popular. Cada vez es más habitual encontrar artículos y tratamientos encaminados a la belleza masculina. Uno de los rasgos que más atraen en los hombres es la virilidad y el pelo, es una muestra de este rasgo. Cuanto más pelo tiene el hombre, más viril resulta, al menos estéticamente.
Actualmente, la tendencia vuelve a cambiar. La barba, está cada vez más de moda: largas, cortas, cuidadas, arregladas o despeluchadas. Los hombres han dejado de afeitarse a diario para mantener su cara a prueba del frio o del sol. Las barberías están en pleno revival, todo tipo de corte de pelo, peinado o afeitado a disposición de la coquetería masculina, para que luego digan de las féminas.
Es tal el auge de la barba, que los expertos de Hair Transplant System, aseguran que uno de los tratamientos más demandados, en cuestión de trasplante capilar, es el de la barba. Quien lo iba a decir hace unos años, cuando la foto depilación masculina, cargaba directamente con el vello facial, aparte de otras zonas.
Vuelve a estar de moda el dicho, sin duda. Al menos en lo que al rostro se refiere. La gran variedad de barbas que puedes ver, no pasa desapercibida. Desde los hipsters con sus barbas largas y en ocasiones con aspecto despeluchado hasta las recortaditas y bien definidas que no pasan de un largo de pocos días. Los hombres hacen gala de su masculinidad y coquetería cambiando su look barbudo hasta que se encuentran cómodos y guapos con el definitivo.
Para ellos se trata de algo similar a lo que ocurre a las mujeres con el maquillaje. Con la barba, pueden disimular algunos rasgos que nos les gusten o consideren poco atractivos o simplemente, mejorar su aspecto.
De ahí que, cuando la barba no sale, es rala o uno es barbilampiño, sienta su autoestima un tanto baja y quiera poner remedio. Es posible, que una calva en la barba, pueda afectarles más que la propia calvicie de la cabeza.
Por ello, vamos a contar como se lleva a cabo un tratamiento de trasplante de barba. Para aquellos que quieran lucir una barba espesa y frondosa con la que juguetear entre los dedos, la opción es posible.
¿Por qué un trasplante de barba?
Las causas de una barba despoblada, pueden ser varias. Desde calvas por traumatismos o cicatrices hasta el propio estrés. Al igual que ocurre con el cuero cabelludo, el pelo de la cara, puede debilitarse o simplemente no haber salido nunca.
Independientemente de la cantidad de pelo que falte, si lo que se busca es una barba poblada, puede llevarse a cabo un trasplante que elimine el problema y dé como resultado un aspecto diferente a quien se lo realice. Este hecho influye de forma positiva a quien se lo haga. Aumentará su autoestima y se sentirá mejor consigo mismo.
Generalmente, aquellos que se someten a este tipo de tratamientos, lo hacen con fines estéticos para tapar cicatrices que presentan en la cara. En otros casos, aquellos que tienen poca barba o bigote o quieren modificarlos, se someten por igual a un trasplante.
La técnica y el procedimiento, son prácticamente indoloros. No presentan ningún riesgo y los resultados son visibles a las pocas semanas. Siendo duraderos y permanentes.
Sin duda, para aquellos que sufren de calvicie en la barba, contar con esta posibilidad para mejorar su aspecto es una opción a tener en cuenta.
Procedimiento
El proceso para llevar a cabo el trasplante de injertos de pelo en la barba, se inicia en la consulta de un especialista. Este va a valorar en la visita, la cantidad de injertos que van a ser necesarios para lograr un resultado óptimo. Teniendo en cuenta la zona a tratar, el tipo de pelo del paciente y el área de pelo que va a ser donante, se planifica la intervención.
La zona de elección para extraer los folículos necesarios, suele ser la cérvico-opcipital y la cervical del cuero cabelludo. De ahí, se cogen los injertos necesarios para implantar en la zona o zonas de la barba que presenten calvas o despoblación.
Tras esta primera visita, el medico ordenará un preoperatorio con el que se comprobará que el paciente cuenta con buena salud y no existen factores que contravengan la intervención. Alguna prueba rutinaria y un cuestionario sobre la salud del paciente son suficientes para obtener la información necesaria.
Igualmente, el especialista, hará saber al paciente que no debe tomar medicamentos unos días antes de la intervención.
Para llevar a cabo el trasplante, se aplicará anestesia local al paciente. Se trata de un procedimiento laborioso que debe practicarse con minuciosidad para que el resultado, sea natural. El especialista debe tener en cuenta la cantidad de folículos a extraer e implantar, la profundidad y la dirección a la que deben colocarse los mismos. Se trata por lo tanto de una intervención que puede prolongarse hasta por seis horas o incluso más.
El postoperatorio debe ser riguroso en cuanto a las indicaciones que el especialista de al paciente. El seguimiento de las pautas indicadas, influirán directamente en el resultado final y satisfactorio del procedimiento.
Los cuidados son básicos pero fundamentales. Como lavar la zona tratada, la postura al dormir o como comer durante los días posteriores serán la clave de un resultado favorable.
La paciencia también debe estar presente en la vida del paciente que se someta a un trasplante de barba, puesto que los resultados definitivos, no se verán hasta pasados los doce meses. Sin embargo, una vez empiecen a caer las costras fruto de la intervención, empezarán a verse algunos resultados.
Como se puede comprobar, realizar un trasplante capilar, en este caso de la barba, no es en extremo complicado. Dada la demanda existente, la oferta va en aumento. Puedes irte a Turquía donde son expertos desde hace décadas o encontrar un centro capilar más cerca de tu casa. En cualquier caso, lo importante es saber que es posible cambiar tu imagen y tener la barba que siempre soñaste.
