Cómo saber si una persona es adicta a las drogas

Muchas personas sufren un problema de adicción a las drogas y sustancias ilegales. Desgraciadamente, muchos de ellos no son conscientes de que lo son. Lo más importante en estos casos es identificar cuando se tiene un problema y diferenciar de manera clara el abuso de las drogas de la adicción.

Para una posible recuperación y que ésta sea exitosa, es importante identificar a tiempo los síntomas de una persona adicta. Los especialistas del centro de adicciones Sinopsis, nos dan una serie de consejos y nos advierten de las señales que pueden indicar que alguien padece adicción a las drogas:

Síntomas de que una persona puede ser adicta a las drogas

1.Mayor irritabilidad: La tendencia a la hostilidad y al enfado es uno de los signos más característicos de la drogadicción. Se debe a dos causas principalmente. La primera, el estropeo de su estado físico y mental provoca que el adicto disponga de tácticas más limitadas para resolver las situaciones que necesitan de un mayor grado de atención y esfuerzo, y esto provoca enfado. Por el otro, si se lleva un tiempo determinado sin tomar drogas, el malestar que esto conlleva, conduce a la persona a centrarse en el objetivo de consumir más, y muchas interacciones sociales que no conducen a ello son vistas como una molestia

2.Aumenta la demanda de privacidad: Es muy común que los drogadictos empiecen sean más quisquillosos que antes con su espacio privado incluso delante de las personas a las que quieren, y comiencen a estar más rato a solas o con otras personas con las que compartan hábitos. En resumen, cambian su red de interacciones sociales en el día a día para emplear menos tiempo con las personas a las que tendrán que dar una justificación si descubrieron que tienen una adicción, y emplean una porción mayor de su tiempo libre para destinarlo con quienes pueden reunirse a la vez que consumen drogas

3.No dan explicaciones de a dónde van: Las personas con problemas serios de adicción relacionados con las drogas requieren involucrarse habitualmente en tareas para obtenerla sustancia psicoactiva a la que están enganchados, y esto se traduce en hablar lo mínimo posible respecto a esto con las personas que pueden alejarles de su objetivo4

4.Complicaciones para conciliar el sueño: La mayoría de las adicciones afectan a la calidad del sueño de los adictos. Esto provoca que los pacientes se duerman tarde, se despierten con facilidad durante la noche y cambien los ciclos de sueño.

5.Dificultad para concentrarse: Las personas adictas, dedican su atención en pensar en la sustancia a la que son adictos. Por ello, incluso cuando están llevando a cabo acciones que no están relacionadas con la droga, no pueden evitar pensar en consumir, o bien en diseñar estrategias para conseguir más sustancias. En resumen, en numerosas ocasiones, los adictos no son incapaces de concentrarse en una labor si no consumen

6.Estrés: El mono, relacionado con el síndrome de la abstinencia provoca que el sistema nervioso de la persona adicta se encuentre en estado de alarma, para observar cuanto antes oportunidades que nos sigan dejando consumir la sustancia responsable de la adicción. Por este motivo, los adictos pueden sufrir sudores fríos, sensibilidad a los cambios del entorno, temblores, mareos, etc

7.Problemas cutáneos: El consumo continuado de diferentes sustancias pude conllevar a diferentes problemas físicos. Esto se observa, por ejemplo, en un envejecimiento más rápido: caída de pelo, surgimiento de arrugas en muy poco tiempo, cambios en el color en de las uñas, sequedad de la piel, etc. Que una persona padezca estos síntomas, no es indicativo de que sea consumidora de drogas, pero junto a otros, pueden indicar que la persona tiene un problema de adicción.

8.Poco a poco, la situación empeora: Los problemas de adicciones conducen al adicto a ver cómo su salud empeora poco a poco. Si la persona no se somete a un tratamiento de desintoxicación, los síntomas de la adicción no suelen remitir. A causa de la necesidad generada por la sustancia, el cuerpo se acostumbra a la droga y el paciente requiere consumir una dosis cada vez mayor y con mayor asiduidad para no padecer las consecuencias del síndrome de abstinencia.

Estos son algunos de los signos que indican que una persona puede estar sufriendo adicción a las drogas.

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